Desde Cusco, Perú, nos llena de alegría compartir la llegada de cuatro jóvenes españoles, Casilda, Bea, Marta y Mario, quienes nos acompañarán durante un mes en nuestra misión. Los días 25 y 27 de junio fueron marcados por su llegada, y desde entonces, su presencia ha transformado el ambiente de nuestra casa, ofreciendo a las niñas una valiosa oportunidad de aprender sobre nuevas culturas y perspectivas.
Después del correspondiente tiempo de descanso para aclimatarse a la altura, se tuvo una sesión de orientación donde se les presentó nuestra misión y se les asignaron las tareas en las que van a colaborar. Desde el primer día, han mostrado un gran compromiso y entusiasmo por contribuir a nuestras actividades.
La llegada de estos voluntarios ya está teniendo un impacto positivo en el Hogar-residencia. Las niñas están entusiasmadas y motivadas por la presencia de estos nuevos amigos internacionales.
Les recibimos con los brazos abiertos y agradecemos la riqueza personal que cada uno trae y que quiere compartir durante este tiempo.
Queremos expresar nuestro más profundo agradecimiento a estos cuatro voluntarios por su generosidad y disposición para compartir su tiempo y habilidades con nuestras niñas y adolescentes.
Su llegada marca el comienzo de un mes lleno de oportunidades y crecimiento para todos.